UN AÑO DESPUÉS

*Las negociaciones para acabar con el conflicto entre Rusia y Ucrania se han desvanecido poco a poco, pues hace unos días Vladímir Putin se salió del acuerdo START III, donde se prohibían las armas nucleares, aunado al aumento de sanciones contra “El Gran Oso”
Corresponsalías Internacionales/Grupo Sol Corporativo
Ucrania.- El 24 de febrero de 2022, el mundo fue sacudido con la noticia que tropas del Ejército Ruso había tomado posiciones en Ucrania, dando comienzo a la guerra entre país y Rusia, a la cual se sumaron diversas naciones alrededor del mundo, esto para ejercer presión sobre “El Oso”, sin que este desistiera en su intento por tomar el país completo y sin importar las sanciones que ejercieron contra ellos.
365 días después, las cifras de muertos están cerca de los 20 mil, aunque de acuerdo a diversas organizaciones este número es bastante bajo, ya que realmente es mucho mayor, aunado a que ninguna de las dos partes involucradas da a conocer el total de manera certera.
En estos momentos, las pocas esperanzas para acabar con el conflicto y evitar una mayor escalada del conflicto se han desvanecido, pues tanto Moscú como Washington han confirmado un mayor número de armas a emplear en la guerra, aun cuando están involucren las ojivas nucleares, pues tan sólo hace unos días, el presidente ruso confirmó su salida del tratado START III.
Y es que ambos mandatarios (Vladímir Putin y Joe Biden) en sus respectivos discursos han avivado las llamas de una guerra a gran escala, dejando a Ucrania como un simple objeto en medio de esto, como un trofeo, donde se desarrollaría el conflicto.
Sin embargo, como si tratara de “La Peste” de Albert Camus, el problema no se queda únicamente en los muertos, sino en la desinformación que se dan en ambos bandos, tanto en el occidental como en el oriental, aunado a las preocupaciones por una “Nueva Guerra Fría” o “La Tercera Guerra Mundial”, temores no poco infundados por parte de la población.
Por su parte, el territorio, de por sí, ya extenso de Rusia ha aumentado de manera considerable con la anexión de la República Popular de Donetsk y República Popular de Lugansk, mientras las operaciones militares al este de Ucrania continúan, ya que de acuerdo a la visión rusa aquella región es parte histórica de su país.
Mientras tanto, China ha decidido no intervenir en la guerra, pese a las acusaciones desde Washington de ayudar a armar a Rusia. Por su parte, pese a la posición clara de Estados Unidos en el conflicto, el expresidente Donald Trump optó por elogiar a Putin, lo que se ha roto el apoyo de los estadounidenses a la política de su gobierno.
Ni el aislamiento internacional de Rusia y la resolución tomada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), votada por cierto, unánimemente, han logrado desaparecer los ánimos en este conflicto.